¿Has decidido cambiar de look? ¿De color me tiño el pelo?
Aquí te proporcionamos una guía rápida que te ayudará a identificar el mejor color dependiendo de tu tono de piel.
¿Qué tipo de piel tengo? ¿Blanca, morena o apiñonada?
Comienza por limpiar tu rostro de cualquier tipo de maquillaje y párate frente a un espejo que esté iluminado por luz natural. Coloca a lado de tu cara diferentes hojas de color por separado. La roja y amarilla se verán mejor con las pieles de tonos cálidos, mientras que las pieles frías lucen mejor a lado de colores como el azul, el blanco y el verde. Asimismo, puedes identificar tu ‘tono bajo’ por las venas de tus muñecas. Si son verdes, te convienen los tonos cálidos, mientras que a las azuladas o blancas les van mejor los fríos.
BLANCA + TONO FRÍO: Los colores que te den calidez pero creen contraste serán los indicados para ti. Si se trata de ir de castaño, elige por uno con toques chocolate. En tintes rubios sacarás mayor ventaja con uno color champagne, mientras que si se trata de tintes pelirrojos, atrévete por un rojo oscuro, casi cobrizo.
BLANCA + TONO CÁLIDO: Apuesta por el café claro o con pequeños destellos de dorado (en especial si tienes los ojos oscuros, pues les darás más luz), el rubio en su modalidad platinada y el strawberry blonde para convertirte en pelirroja.
APIÑONADA + TONO FRÍO: El azul y el blanco son de los colores que mejor te quedan al vestir, por lo que tu tono de piel va ideal con aquellos tonos de cabello que suavicen tus facciones y te den un look más bronceado. El castaño acaramelado y el degradé a rubio cenizo te quedarán niquelados. Para pelirrojas, opta por un caoba. Evita el rubio platinado y el negro azulado. ¡Te harán ver pálida!
APIÑONADA + TONO CÁLIDO: Al igual que el castaño oscuro, puedes llevar el negro azulado. Si se trata de rubios, el honey blonde es para ti, mientras que en rojizos, puedes apostar por uno con una base clara.
Recuerda que entre más grande sea el contraste entre tu cabello y tu piel, más se notarán tus facciones.
MORENA + TONO FRÍO: La piel de tintes amarillentos es perfecta para probar con distintos colores para el cabello. Los que mejor sientan son el castaño oscuro, el ombré con un rubio rojizo y el cobre.
Si eres de pelo castaño, un ombré es la forma ideal de llevar los tonos rubios.
MORENA + TONO CÁLIDO: Las chicas con esta tonalidad de piel se verán beneficiadas por los tonos con base fría, aunque también pueden optar por los brillantes. El castaño oscuro perfila mejo r las facciones, y el rubio platinado las suaviza. ¿Se te antoja ser pelirroja? Opta por un con un café rojizo.